domingo, 24 de noviembre de 2013

Crónica de un nombramiento ¿anunciado?

Mentes brillantes de Imarpe se hacen nombrar a dedo
 
En las oficinas de administración del Imarpe se cocina a fuego rápido un nombramiento a la Blitzkrieg, antes que las sombras de la flamante Ley del Servicio Civil acechen e impidan la incorporación a planilla por concurso de nuevos servidores públicos bajo los beneficios y el ala protectora del DL 728. ¿Quiénes son los beneficiados de los que hablamos? Los directores imarpinos con contrato CAS: Dimitri Gutiérrez Aguilar y Carla Aguilar Samanamud. El que compartan un apellido es mera coincidencia.
 
El nombramiento, aunque amañado y por lo tanto poco ético, es entendible. Se busca retener a un profesional que ha gestado proyectos importantes ante el GEF (Global Environmental Facility, del Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas), que ostenta varias publicaciones científicas en su haber y que ha ejecutado con éxito algunos proyectos científicos. Un profesional con un doctorado obtenido en Chile, el vecino país con quien tenemos un diferendo marítimo y serios desacuerdos en cuanto al manejo de los recursos marinos transfronterizos (léase anchoveta y jurel por mencionar los más importantes). Ah, y no nos olvidemos que cuenta con el padrinazgo del Dr. Jaime Mendo, profesor de la Universidad Nacional Agraria y miembro del Consejo Directivo del Imarpe, presidido por el Calm AP (r) Germán Vásquez-Solís Talavera (a) “Soy amigo cercano de Nadine”. Como diría el vulgo, “Nadine te tiró arroz, pelao, no es tu pata”.
 
Ese secreto que tienes conmigo…
nadie lo sabrá,
este secreto seguirá escondido una eternidad…”

Ante el “entendible” de líneas arriba le sigue un “pero”. Y este conector adversativo tiene nombre y apodo: Carla Aguilar Samanamud (a) “Chata Diabólica”. Su nombramiento sería un insulto a la meritocracia que tanto pregona este gobierno. Numeremos el por qué:
 
  •           Un proyecto FINCyT que engañó al entonces Presidente del Consejo Directivo del Imarpe, Calm. (r) Héctor Soldi Soldi y el cual fue descrito por el jefe de la Oficina de Planificación y Presupuesto como “venta de sebo de culebra”. Un proyecto en donde se falsificó data y se le echó la culpa a la empresa privada, socia en dicho proyecto (contrato 025-FINCyT-PIBAP-2007 “Determinación de la biomasa microalgal potencialmente acumuladora de lípidos para la obtención de combustible”). Hasta ahora se está esperando una demostración con su preciado combustible.
  •  Intentó desfalcar al FINCyT de nuevo con la presentación del proyecto PIAP-1-P-418-13 “Producción piloto de biomasa y extracción de aceite microalgal para la obtención de biodisel”, el cual, palabras más palabras menos, es el mismo proyecto del 2007. Felizmente los del FINCyT, convenientemente alertados, no se tragaron el cuento y no le aprobaron el proyecto.
  •         Fracaso absoluto en la ejecución del PpR (Presupuesto por Resultados) de la Dirección de Acuicultura en lo que concierne al Imarpe, con una ejecución que bordea el 36% a fines de noviembre. Gran parte de este dinero se ha evaporado en pagar a los novatos que contrató para reemplazar a los profesionales que despidió y/o desplazó. Igualmente para beneficiar a su entorno.
  •          Firma ciegamente los viajes y gastos de sus compinches: Lili Carrera Santos, Cristian Santos y José Cavero.  Este último, a pesar de pasar a CAS este año, ha recibido por encargos para hacer viajes al VRAEM un total de 77,050.00 nuevos soles. En dos de estos encargos de 25,000.00 cada uno (julio y noviembre del presente), pagó mediante recibos por honorarios a los villarrealinos: July Esther Montoya Vargas (S/. 3,000.00 en dos oportunidades), Santos Valentín Mogollón Ávila (S/. 3,000.00) y Mary Fátima Manrique Carhuas (S/. 3,000.00), todos domiciliados en LIMA. ¿Viajaron al VRAEM? ¿Con qué viáticos si no había para ellos? Tres mil soles no alcanzan para una estadía de 20 días en el VRAEM que incluya movilidad. Cualquier otro director hubiese cuestionado esos pagos, pero no Carla Aguilar. ¿Repartija?
  •          Carencia de publicaciones científicas en revistas indexadas. Para una persona que se lista como investigadora en la base de datos del CONCYTEC, debe ser desolador saber que su CV carece de un listado de publicaciones en revistas indexadas. Su compendio de metodologías publicado en la página del Imarpe, sin número de ISBN, debería avergonzar a la institución que representa, pues dichos protocolos son de conocimiento de muchos investigadores. Cite las referencias, Srta. Aguilar.
  •          Falsificación de datos. No hay nada peor que un investigador que crea data para suplir la falta de producción científica con la cual cumplir los objetivos propuestos. Sus resultados se pueden llamar “datos vapor”. Sus objetivos cumplidos, invenciones puras. Si hubiese cumplido, tendría publicaciones, ¿no lo creen?
  •          Nunca es su culpa. Si no llega a cumplir sus objetivos o se caen sus procesos de adquisición de bienes, la culpa es de otro, de su personal o de administración o de los que despidió. Como directora lo que pase en su dirección es su responsabilidad. Asúmala.
 
Pero algún mérito ha de tener, ¿no? Claro que sí: tiene una maestría de una universidad chilena (la inefable Universidad de Concepción), la misma de la cual obtiene su doctorado el Dr. Dimitri Gutiérrez Aguilar. Es sabido que durante su estadía en Chile, Carla Aguilar convivió con Dimitri Gutiérrez. No sean malpensados. Su hermana casi melliza, Eda Elizabeth Aguilar Samanamud es Directora General de Adopciones del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, dirigido por la cuestionada Ana Jara Vásquez. 

El Dr. Dimitri Gutiérrez apoya a Carla Aguilar en su carrera (para que ascienda como directora y ahora para que la nombren). Quizá esa convivencia en Chile tenga sus secretos. Pues no se entiende el por qué ese apoyo si la Srta. Aguilar carece de los méritos que sí ostenta el Dr. Gutiérrez. Como investigador debería apoyar a aquellos que demuestren tener méritos, Sr. Gutiérrez, no deje que nadie se cuelgue de su cuello, toda vez que Ud. colaboró con los científicos que apoyaron al equipo de Burneo en los inicios de este gobierno y que fueron defenestrados por la mafia aprofujimontesinista infiltrada en el gobierno al que Ud. ahora sirve. Dr. Dimitri Gutiérrez, haga Ud. honor a sus apellidos y no deje que avance con Ud. si lo merece, que se lo den, si no, chau. “Ese secreto que tienes conmigo… nadie lo sabrá, este secreto seguirá escondido una eternidad…”

jueves, 29 de agosto de 2013

LOS CIENTÍFICOS ENGAÑAN DESDE SIEMPRE



La engañología o cómo ser "exitoso" recurriendo a la mentira

Los científicos engañan desde siempre, y no sólo los mediocres; entre la nómina de falsificadores nos encontramos con los nombres de prestigiosos premios Nobel y con los creadores de la ciencia moderna. El engaño siempre ha sido un arte. Desde hace algún tiempo se ha convertido también en una ciencia. La engañología es la ciencia que enseña a los científicos cómo engañar a otros científicos, el objetivo real lo constituyen los científicos que forman parte de los organismos estatales que financian la investigación y que son los que tienen que decidir qué estudios y qué investigadores deben obtener la ayuda económica y a cuánto debe ascender.
La engañología, pues, enseña a quien no lo es, a disfrazarse de científico exitoso y señala el camino que le permitirá surgir de entre la masa de anónimos investigadores mal pagados y frustrados.

Esta neociencia incluye dos secciones: La burocrática es la parte más fácil, aunque no por ello menos importante. Incluye una sección que explica a los falsificadores más ambiciosos de qué manera pueden implicar a los organismos administrativos del Estado en sus estafas.

Sin embargo, el verdadero núcleo de la engañología es la parte técnica. En la base de una sólida, aunque falsa reputación científica, se encuentran siempre y ante todo, los trucos bibliográficos, que van desde la publicación del mismo artículo (si bien con otro título) en la mayor cantidad posible de revistas, pasando por la divulgación de datos inventados (técnica que permite publicar muchísimo en poco tiempo y con poco esfuerzo), hasta el plagio descarado; existen también el robo de ideas, de material de experimentación, de los apuntes de colegas, y la sustracción de tablas, cuadros y fotografías.

Los fraudes graves más corrientes son: la fabricación de datos, cuando los autores se inventan todos o parte de los datos del estudio, la falsificación, cuando se proporcionan datos falsos o modificados de los datos reales existentes a fin de obtener resultados más favorables a las hipótesis de partida.
Le engañología nace virtualmente cuando la ciencia de vocación se transforma en profesión y, concretamente, con la “Big Science”, la ciencia de los grandes proyectos, que nació amparada por el dinero, “The Big Money”. La ciencia se parece cada vez más a un negocio, por lo que el dinero tiene una gran influencia en el comportamiento científico, lo que puede haber propiciado la desviación del valor tradicional de la ciencia que es la búsqueda desinteresada de la verdad. Además, el fraude científico se facilita tanto por la presión institucional ejercida hacia los científicos para conseguir ayudas y subvenciones.
Hoy en día, cuando la población científica ha aumentado en los países ricos, las financiaciones han disminuido y la creatividad media del científico ha decaído, el investigador delinque simplemente para no perder fondos. Hoy, a fin de cuentas, se engaña por dinero; antes se hacía por una idea.

Es innegable que las políticas referentes al proceso científico, tales como aquellas diseñadas para incrementar la productividad en la investigación, asignar recursos financieros, determinar salarios, promociones y recompensas y las presiones para publicar están exacerbando el comportamiento fraudulento de los científicos. Las instituciones que financian las investigaciones deben tener una base de datos actualizada sobre las denuncias y resultados de mala práctica en la investigación y deben definir sus propias políticas en relación con los investigadores que incurran en fraude. La investigación hecha por una persona que cometa fraude deliberadamente e involucrando fondos públicos se debe registrar y tratar como un acto criminal. (Ver LAS MENTIRAS DE LA CIENCIA. ¿Por qué y cómo engañan los científicos?, de Federico di Trocchio)

Este preámbulo viene a consecuencia de la lamentable situación en que se debate el Instituto del Mar del Perú, en manos del marino (r) Germán Vásquez-Solís Talavera y el Director Ejecutivo Científico, Andrés Chipollini, asesorados ambos por el ex director ejecutivo, Marco Espino.

En el Perú, debido a la bonanza de recursos otorgados por el Estado a proyectos de investigación, se han presentado casos en los que “reputados” centros de investigación malversan fondos públicos de manera sistemática, incurriendo incluso en fraudes que en cualquier otro país serían castigados de manera ejemplar.

Saltan a la vista las sesudas investigaciones que se vienen realizando en el C.I.A. Alexander von Humboldt del Instituto del Mar del Perú, referidas a la extracción de aceite a partir de microalgas para elaboración de biodiesel, un despropósito económico e incluso ecológico desenmascarado en diferentes partes del mundo. La bióloga Carla Aguilar, quien lidera estos simulacros de investigación, ha sido cuestionada incluso por la empresa privada (EcoEnergias del Perú SAC) que apoyó inicialmente sus investigaciones, al encontrar sus conclusiones poco creíbles o engañosas, considerando información de otras partes del mundo y quien ahora quiere engañar a la empresa Pure Biofuels del Peru SAC con un nuevo proyecto que busca financiamiento del FINCyT, cuyo Director Ejecutivo ha sido puesto de aviso.

Siguiendo con el tema de Acuicultura, en abril de este año, se arrojaron 1500 juveniles de lenguado al mar de Pisco bajo el eufemismo de “repoblamiento” sin ningún estudio previo de evaluación ambiental, ni certificación sanitaria, ni programa de seguimiento y monitoreo de esos peces (http://elmarnuestrodecadadia.blogspot.com/2013/04/repoblamiento-de-lenguados-en-pisco-o.html); algo poco menos que risible, “tirado de los cabellos” y un insulto a la inteligencia de la comunidad científica, a las asociaciones de pescadores artesanales y al país entero.  En dicho simulacro de repoblamiento actuó como “furgón de cola” la Ministra Gladys Triveño, quien de acuicultura sabe tanto como de chino mandarín. Díganos, señora Ministra, ¿qué fue de esos pobres lenguaditos arrojados al mar, despilfarrando cientos de miles de soles que costó su crianza? ¿Acaso ese acto de despilfarro del dinero de todos los peruanos no constituye fraude científico y malversación de fondos público? ¿Acaso no fue usted quien en su inopia avaló el engaño al que fue inducida por los científicos (sic) del C.I.A.  Alexander von Humboldt y por el Presidente del Imarpe?

Otra perla de esta institución científica, faro de sabiduría y crisol de estratagemas, es el célebre Presupuesto Por Resultados, que pródigamente el MEF adjudica a instituciones públicas que presenten transcendencia en sus actividades.

Pues bien, resulta que el Imarpe y específicamente la Dirección General de Acuicultura, Gestión Costera y Aguas Continentales, bajo la gestión del Blgo. Carlos Vergara, Director en ese entonces (2012), logró que el MEF, dentro del marco del Ordenamiento y Desarrollo de la Acuicultura para el periodo 2013 – 2016, obtuviera un presupuesto para el 2013 de alrededor de 8 millones de soles. Esta inyección monetaria de confianza a las investigaciones que venía realizando la Institución en el tema Acuícola se vería impulsado con un presupuesto acorde con las necesidades de investigación que el país requería en esta actividad económica.

Luego de la expatriación del ex Director Vergara, la Alta Dirección del Imarpe, llámese Presidente de Directorio y Director Ejecutivo Científico, decidieron colocar en su lugar a la bióloga Carla Aguilar, cuya carta de presentación fue una maestría en la Universidad de Concepción en Chile, lo que le sirvió para escalar posiciones y dedicarse a cultivar microalgas de forma deficiente, abusando del pequeño poder que le fuese otorgado como Directora de Acuicultura En contraparte, la Srta. Aguilar exhibe una genuflexión presuntuosa ante la Alta Dirección del Imarpe ,  todo lo cual le ha servido para obtener un jugoso incremento de sueldo (10 mil soles mensuales) solamente por mantener a la riada de profesionales de la Dirección a punta de coacciones, sin el menor atisbo de descontento.

Pues bien, a estas alturas del año (fines de agosto del 2013), ¿cuáles son los resultados obtenidos por la bióloga Aguilar con los S/ 7´382,887 asignados a la Dirección de Acuicultura por el MEF?

El siguiente es un cuadro de gastos al presente obtenido del portal del MEF:



 



 
Como se aprecia en el cuadro de consulta amigable de TRANSPARENCIA ECONÓMICA del MEF (http://ofi.mef.gob.pe/transparencia/Navegador/default.aspx) el Imarpe al 20 de agosto del presente, solo ha gastado el 11.3% del Presupuesto Institucional Asignado para el Ordenamiento y Desarrollo de la Acuicultura.

En primera instancia, todo indicaría que no se vienen cumpliendo los objetivos trazados por la actual gestión. Veamos ahora en qué se ha gastado hasta el momento ese 11.3% de los casi 8 millones obtenidos por la anterior Administración.



 



 El 19.1% de ese 11.3% gastado se ha destinado a bienes y servicios (viajes y contratación de personal allegado a la Directora, así como cursillos de especialización) y solo el 3.6% se dedicó a la adquisición de equipamiento y acondicionamiento de infraestructura necesarios para la labor de investigación que supuestamente realizan.

Bajo esta perspectiva, debemos deducir:


  1. La incapacidad absoluta de la Directora de Acuicultura para gestionar un presupuesto que a todas luces le quedó literalmente GRANDE. En el colmo de la desfachatez, Aguilar solicitó al MEF la friolera de 17 Millones de Nuevos Soles para el 2014, según nuestras fuentes en el MEF, semejante insolencia fue rechazada de plano, debido precisamente a su notable incapacidad de administración, aunque la premiaron con 4 millones de Nuevos Soles para el 2014.  ¿Qué opina usted, Ministra Triveño?
  2. Bajo las circunstancias mencionadas, no extrañaría que el último trimestre ejecutable del año  (setiembre, octubre y noviembre, ya que diciembre es para el sector público un mes de rendiciones de cuentas), Aguilar emprenda una carrera disparatada de compras de Activos No Financieros para gastar el 85% de presupuesto restante y que no supo proyectar de manera planificada a lo largo del año. Según fuentes internas de su Dirección, la Aguilar justificaría su inoperancia diciendo que  “EN ESTE AÑO SÓLO ESTA PLANEADO COMPRAR EQUIPOS Y QUE RECIEN EL PROXIMO AÑO REALIZARÁN LAS INVESTIGACIONES...” Estas palabras que grafican el grado extremo de sinvergüencería de la bióloga Carla Aguilar han sido grabadas y pronto serán colgadas en Youtube.
  3. ¿Qué tipo de Investigaciones ha gestionado la Directora de Acuicultura a lo largo de estos 8 meses, toda vez que no se ha ejecutado el presupuesto en la compra de las herramientas (llámese equipamiento) con las cuales se realizan los trabajos de investigación? ¿Es un nuevo paradigma de avance científico en la que la “carreta va delante de los caballos”? ¿O es que no necesitaba ese dinero? Si así fuese,  ¿entonces por qué Aguilar pide 17 millones a sabiendas de que no lo va a gastar?
  4.  El más grande “logro científico” de Aguilar y su equipo, será su participación representando al Imarpe en el banquete de Mistura 2013, evento en el cual sus adulones estarían obteniendo jugosas ganancias (¿Si o no, técnico Cristian Santos?). Sabemos de muy buena fuente que en la Feria Mistura 2013 el Ministerio de la Producción ha invertido más de UN MILLÓN DE SOLES para la construcción de un “Acuario”, para solaz de glotones y malcriados.  ¿Creen ustedes que los peruanos de los extramuros de la ciudad podrán pagar la entrada a Mistura? Eso se llama descaro, fraude y muy probablemente, corrupción.  Triveño justifica este despilfarro diciendo que se hace para que el pueblo peruano “tome conciencia” acerca del mar y sus recursos.  Sería interesante saber qué opinan los cientos de miles de pescadores artesanales y los pequeños empresarios pesqueros abusados por los tiburones de la SNP.


Nos preguntamos, ¿esta es la manera en que el Ministerio de la Producción y el Imarpe invierten en investigación científica? Una Dirección General de Investigación, clave para el desarrollo de la Acuicultura del país, que prioriza sus gastos en viajes, contratación de personal, cursitos de formulación de proyectos (porque al parecer ni siquiera saben de eso) y ferias gastronómicas en un país de desnutridos crónicos, es una Dirección sin norte ni horizonte.

Cabe recordar que hay instituciones en el país que sí realizan investigación, como las universidades que merecen tal nombre y cuyos presupuestos exiguos deben estirarse como jebes. Mientras tanto, la Alta Dirección del Imarpe, encabezada por el marino (r) Germán Vásquez-Solís y el biólogo Andrés Chipolini, se da el lujo de mantener en su cargo a una bióloga inútil y dolosa.

Por desgracia, el malgasto es difícil de detectar y aún más difícil de corregir, a veces oculto a simple vista, tenemos una institución que gasta a última hora pensando (si acaso lo hace) únicamente en saciar aquel apetito voraz que impulsa su actuar, mas no en si lo que hace resulta o no saludable y oportuno. Gastar por gastar, contratar por contratar, sin considerar si lo que se está haciendo resulta verdaderamente eficiente, eficaz y efectivo, lo cual es tan reprochable como permitir la malversación. Creemos, que estas denuncias solo son la punta del iceberg de un sistema totalmente ineficiente e inmoral.

Mientras Imarpe siga siendo el campo de aterrizaje de marinos retirados que ven a la institución como fondo de jubilación y mientras no se extirpe esa carnosidad hiperplásica que son los “científicos nombrados”, algo se seguirá pudriendo en el edificio de La Punta.  Y no solo en Acuicultura.  El olorcillo que despiden Pelágicos, Demersales, Oceanografía, Pesca Artesanal, Flota, Prensa Administración, se percibe a la legua.  Y no es sólo el pescado podrido que se almacena en la sala de muestreo del pobre Instituto del Mar del Perú. 

P.D. : ¿A qué tiene que ir el defenestrado ex-director científico del Imarpe, Renato Guevara Carrasco, fiel amigo del nefasto Marco Espino y defensor de la SNP a la reunión de la OROP el próximo 20 de octubre en EEUU? ¿Por qué tienen que viajar cuatro servidores públicos del Imarpe por 8 días a EEUU? Quizá a defender los intereses de la SNP.

domingo, 30 de junio de 2013

FRACASO DE LA BUROCRACIA PSEUDO-CIENTÍFICA EN IMARPE

Al hipócrita apoyo brindado por los jerarcas del Imarpe a la Ministra de la Producción, Gladys Triveño, en su titánico enfrentamiento contra la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP), se suma la deplorable gestión reflejada en las cifras de ejecución presupuestal, que ni siquiera alcanzan los niveles de gasto ejecutados a la misma fecha en el 2012, tal como analiza Marcos Kisner de la Revista Pesca (http://elmarabierto.blogspot.com/2012/06/ejecucion-presupuestal-del-imarpe-al-2.html).

Tal parece que razón no le falta al asesor de los industriales pesqueros, Luis Icochea Salas, cuando afirma públicamente a través de Gestión y RPP (http://gestion.pe/economia/luis-icochea-imarpe-esta-desacuerdo-decreto-sobre-pesca-anchoveta-2062557) que los científicos del Imarpe están en contra del D.S. 005 y tan sólo por temor no osan contradecir a Triveño, manifestando su desacuerdo de la forma más oblicua, es decir, actuando con total ineficiencia en la gestión del presupuesto destinado al Instituto del Mar del Perú.

El monto destinado a la investigación marina en el país resulta miserable en comparación con las cifras de exportación pesqueras. Sólo en el 2011 las exportaciones pesqueras totales sumaron ¡más de 3,000 millones de dólares!, mientras que el Imarpe recibió sólo el ¡0.56%! de esta astronómica cifra, 44 millones de soles, que llegan tarde mal o nunca a quien realmente investiga, pues este dinero se diluye entre la burocracia y los marinos que comen echados en el Imarpe y que ganan más del triple de lo que gana cualquier científico con maestría o doctorado (ver en Transparencia los sueldos del Presidente del Imarpe, el Jefe de Flota, el de Administración).

¡31.4% de ejecución de gasto total y
6.8% en Acuicultura a medio año!



Para el año 2012, el monto de exportaciones pesqueras para consumo humano directo ascendió a la suma de 1,013 millones de dólares y gracias a la gestión del Dr. Carlos Palomares y el equipo de trabajo que fue defenestrado luego de la caída del ministro Kurt Burneo primero y Patricia Majluf después, el Imarpe obtuvo un presupuesto histórico para el 2013 de 60,689,887 como PIA y 67,058,834 soles como PIM.

Sin embargo, la ejecución presupuestal a finales de junio llega el 31.4% en el global y apenas al 6.8% de gasto del PpR (presupuesto por resultados) “Ordenamiento y Desarrollo de la Acuicultura”. En este último caso el nivel de gasto alcanzado es preocupante, si se le compara con los otros pliegos que también recibieron dinero del mismo programa presupuestal, “Ordenamiento y Desarrollo de la Acuicultura”: el Instituto Tecnológico de la Producción ha ejecutado 51.3 %, el Fondo Nacional de Desarrollo Pesquero con el 23.7 % y el PRODUCE con 19.8 %. Elogios para el ITP y sorprendente lo de PRODUCE, que a pesar del desorden resultante de la reorganización profunda de la estructura del Ministerio este ha podido ejecutar casi un 20 % del PpR. ¿Entonces qué pasa con el Imarpe? La reorganización del sector Producción no le afectó en nada más que los nombres de las direcciones, la formalización de la Dirección de Oceanografía y la fusión de la Dirección Ejecutiva y la Dirección Científica en la actual Dirección Ejecutiva Científica. ¿A qué se debe ese letargo en la ejecución presupuestal y en el cumplimiento de los objetivos del PpR? Eso pasa cuando los cargos directivos en la parte administrativa son asumidos por marinos retirados que serían amigotes del Presidente del Imarpe.

Esta ineficiencia en la gestión ejecutivo-científica de la Institución refleja el nivel de quienes han asumido la dirección del Imarpe, el marino Germán Vásquez-Solís y el DEC Andrés Chipollini, más preocupados en aferrarse a sus cargos y remotorizar un inservible Humboldt y “mejorar” el BIC Olaya y el SNP-2 (4.6 millones de soles entre las dos naves), que en servir al país y al sector pesquero. Todo indica que a fin de año Imarpe tendrá que devolver dinero al Estado por incapacidad de gasto. ¿Y los marinos que incrustó Vásquez-Solís en el Área Funcional de Flota y la Secretaría General? Bien gracias, ganando ocho mil soles cada uno. Curiosamente, los trabajos de remotorización del Humboldt se realizaron en los astilleros del SIMA (Servicios Industriales de la Marina) y los trabajos para realizar las mejoras del Olaya y el SNP-2, los cuales incluyen la ampliación de las naves, se realizarán en los mismos astilleros, pues no hay otra que cuente con el conocimiento para hacer lo último. Más plata para los marinos retirados. Curioso, ¿no?

El caso de la Dirección General de Investigaciones en Acuicultura

La maldición de la acuicultura en el Perú es la anchoveta. Con capturas anuales que superan los 6 millones de toneladas, sin incluir la pesca negra, con industriales pesqueros que causarían la envidia de Tony Soprano, capaces de depredar, contaminar y robar al país mediante la evasión y elusión de impuestos, y sobre todo con la complicidad de científicos que prefieren la seguridad del sueldo de fin de mes a trabajar honestamente, la acuicultura marina en el Perú, tras veinte años de sesudas investigaciones, tiempo y dinero, se reduce a dos especies: concha de abanico y langostino en el ambiente marino costero.

A un año de la salida del Dr. Carlos Palomares, primer Director Ejecutivo de IMARPE de la administración Humala, la situación en dicha entidad investigadora y particularmente en la Dirección General de Investigaciones en Acuicultura (de donde fueron despedidos intempestivamente ocho investigadores), es lamentable.

Quienes trabajan en Imarpe fueron testigos muchas veces de los alaridos despectivos del ex director científico Renato Guevara Carrasco, para referirse a la acuicultura. Guevara fue director científico del Imarpe durante diez años (primero con Toledo y luego con Alan García). Quien se pensaba director vitalicio de Acuicultura del Imarpe, el biólogo Víctor Yépez Pinillos, fue remplazado por Carlos Vergara Manrique de Lara, quien asumió la Dirección de Acuicultura con el gobierno de Ollanta Humala.

Carla Aguilar, bióloga de la Universidad Ricardo Palma, es una persona conocida en el Imarpe por su genio irascible y su prepotencia, contrastantes con su diminuto tamaño. Recordada por maltratar a los técnicos del área, Aguilar acostumbra contratar muchachos con habilidades especiales para su servicio. Durante varios años se hizo cargo del Laboratorio de Biotecnología, hasta que a fines del año 2011 fue desenmascarada, pues habría estado manipulando cifras de extracción de aceite de microalgas para obtener financiamiento del FINCyT. Sus allegados cuentan que días después del triunfo de Humala vociferó que se iría del país lo más pronto posible. Hoy vive del gobierno de Humala, ganando más de diez mil soles al mes como Directora General de Investigaciones en Acuicultura.

Luego de la salida de Burneo como Ministro de la Producción, la alta rotación de funcionarios y la cantidad de intrigas que se cocieron al interior del sector Producción, sub sector Pesquería, también causaron sus efectos en el Imarpe. Uno de los altos funcionarios rotados ante el sucesivo cambio de vice-ministros de Pesquería fue el biólogo Carlos Vergara, quien fue despedido tras un año de gestión como Director de Acuicultura. El equipo de investigadores que se conformó durante dicha gestión logró un presupuesto histórico para la Dirección de Acuicultura del Imarpe mediante el PpR, además de tener un amplio conocimiento en el manejo y gestión de los recursos y laboratorios de investigación.

Es bajo esas condiciones, con un presupuesto nunca antes visto a disposición de la Dirección General de Investigaciones en Acuicultura del Imarpe, que la Blga. Carla Aguilar asume las riendas de la Dirección, se entroniza como reina absoluta de Acuicultura y cae de rodillas ante el Presidente del Imarpe. Despreciando el expertisse del controversial Víctor Yépez, lo destina a una intrascendente oficina, para que no le haga sombra con su prosopopeya impactante. Su intrigas provocaron que, la también bióloga de la Universidad Ricardo Palma, Rosario Cisneros, emigrase a una Dirección ajena a su expertisse, para eludir la guillotina que su querida colega mantiene afilada a la espera de su cabeza. Despedidos los profesionales que constituían la estructura de la Dirección, fugada Cisneros, el fracaso en la gestión de la liliputiense Aguilar era sólo cuestión de tiempo.

Aliada con la ingeniera Lili Carrera Santos de Santos, reconocida por su discapacidad para formular ideas y planes de trabajo y buena tan sólo para ejecutar órdenes, Aguilar ahora agoniza lentamente.

Ejecución del gasto presupuestal en Acuicultura

Llama sobremanera la atención que en la Dirección de Acuicultura la ejecución del gasto a mitad de año, ronde el 6.8% lo cual muestra la “capacidad” de la bióloga Aguilar y su equipo de muchachos con habilidades especiales.

Con un PpR al ¡6.8%! del gasto al 29 de Junio del 2013, la Blga. Carla Aguilar ha tenido el desparpajo de pedir para el siguiente año mayor presupuesto (17 millones de soles), pese a que no puede ejecutar el gasto solicitado. Discapacidad y extrañamiento de la realidad, propios de un cuento de fantasía pero con dinero público.

Por otro lado, ignorando las capacidades propias de la Institución en la que labora, Aguilar ha contratado a un economista, el Sr. César Eduardo Alvis Tafur (ex jefe de la Oficina de Planificación y Presupuesto - OPP - de INVERMET), con excelentes relaciones en PRODUCE, para que realice un diagnóstico de la situación de la Dirección General de Investigaciones en Acuicultura, tras medio año de gestión, cuando esta evaluación correspondería en todo caso a OPP de Imarpe. Acaso la ignorancia de Aguilar sobre las investigaciones en acuicultura que se realizan en la Dirección bajo su mando la obliga a contratar a personal externo para que realice una labor que le corresponde como Directora o peor aún, no confía en la capacidad de su equipo de chicos con habilidades especiales. Bajo estas circunstancias, no se entiende cómo esta Srta., ignorante en temas acuícolas, “angurrienta” cuando se trata de pedir más presupuesto para actividades de investigación que no comprende, continúa en el cargo; probablemente, como se mencionó antes es del grupo de mentes brillantes graduadas en Chile que se hincan ante el ex marino Vasquez-Solís, supuesto gran amigo del Presidente Ollanta Humala.

En las oficinas de la “nobleza” Imarpina se comenta que la contratación del economista Alvis Tafur es solo una pantalla para que Aguilar, en un acto propio de Pilatos, se lave las manos y diga non est mea culpa a la hora que el MEF le reclame por el cumplimiento de los objetivos del PpR.

Para coronar sus males, según información de último minuto, se acaba de caer una licitación por PpR con la empresa Spena Fish, pues quien formuló el pedido lo hizo mal. ¿Quiénes lo hicieron? ¿Quién es la culpable de esta escandalosa pérdida de adquisición? Dónde quedan las sanciones para los funcionarios que impidan, con su incapacidad o mala fe, las inversiones?

El viejo cuento de extraer lenguados: en 6 meses cheques por ONCE MIL SOLES

Ante la incapacidad comprobada de Carla Aguilar, sus cómplices hacen lo que quieren. Se sigue destinando recursos para continuar con las famosas salidas a campo para sacar lenguados y exprimir sus gónadas, ¡después de más de diez años de investigaciones! ¿Quiénes son los encargados de extraer lenguados del mar? Nada menos que los esposos Santos-Carrera, quienes van de paseo a extraer chitas, lenguados y cabrillas para seguir jugando a la acuicultura, pero con plata ajena. Para dar una idea del franco favoritismo hacia esta parejita, el técnico Cristian Santos en tan sólo los primeros 6 meses del 2013 ha recibido cheques por un total de 11 mil nuevos soles para gastos de viaje y logística, cuando durante todo el período 2005-2012 (8 años) el monto que recibió apenas superó los 10 mil soles. Obviamente, luego de cobrar los cheques el astuto Cristian Santos “ejecuta” el gasto y presenta los recibos que lo justifiquen y listo. Todo queda en familia.

Cuidado, Srta. Aguilar: desperdiciar recursos públicos es un crimen y el viejo cuento de recolectar lenguados, chitas y cabrillas del medio natural, un cuento que en Imarpe se viene contando desde hace más de diez años, será auditado muy pronto. No se crea Ud. eterna.

El futuro de las investigaciones en acuicultura en el Perú

La acuicultura es la alternativa a la pesca extractiva, cuyos actores se sacan los ojos con interpelaciones groseras y actividades mediáticas que no hacen si no demostrar una y otra vez la angurria de los armadores pesqueros peruanos y los corsaires de la SNP.

Pese a lo que quieren los pesqueros industriales, el mar tiene un límite productivo que si no se cuida se caería para no volver. Es en este panorama que la acuicultura aparece como una alternativa real. Véase el ejemplo de una China tan de moda hoy, con una producción acuícola que supera en producción a la pesquería extractiva.

Ya que nos agrada tanto copiar, ¿por qué no lo hacemos y desarrollamos la acuicultura del país? Tres instituciones en el Perú investigan y/o trabajan en acuicultura en el Perú desde hace décadas. Las mismas caras se ven en este rubro desde hace varios años y no hay resultados halagüeños. El Instituto del Mar del Perú, el Fondo de Desarrollo Pesquero (21.4% de ejecución presupuestal a la fecha, un escándalo) y la Dirección de Acuicultura del Produce, con cientos de millones de soles invertidos en investigar y promover la acuicultura en el Perú, han logrado tan sólo la explotación a medias de dos especies: concha de abanico y langostino y promovido el consumo interno de una, la trucha Muy a duras penas, más por el trabajo y el esfuerzo del privado que por apoyo del propio Estado.

Pero en el Imarpe, la señorita Aguilar sigue con la farsa: el futuro de la acuicultura en el Perú está en el cultivo de peces carnívoros, un absurdo que a nivel mundial ya nadie se cree.

Las capturas mundiales en pesquería se cuadruplicaron desde 1950 hasta 1990, según el World Ocean Review, para ascender desde los 20 millones de toneladas anuales en todo el mundo hasta los 80 millones. El 75% de las capturas se destina a consumo humano (la mitad en fresco, la cuarta parte en congelado y otra cuarta parte enlatado) y el otro 25% se dedica a fabricar harinas de pescado, usadas en gran parte en la acuicultura. Ésta también ha crecido, a un ritmo de hasta el 7% anual, hasta llegar a suponer ahora mismo el 40% del pescado que se come en todo el mundo.

La acuicultura, sin embargo, no ha disminuido las capturas, sino que las ha aumentado. Como la mayoría de los peces que se cultivan en granjas son predadores y carnívoros, hay que alimentarlos con más peces, con tasas de eficiencia que pueden llegar hasta los cinco kilos de pescado gastado en producir un kilo de pescado de acuicultura.

¿Cuál es el índice de conversión alimenticia de los lenguados que cultivan en Imarpe, Srta. Aguilar? ¿Y en Fondepes, saben por lo menos qué significa conversión alimenticia? ¿Seguridad alimentaria con lenguados, chitas, cabrillas? Por favor, señores, estamos jugando a la acuicultura para alimentar a los ricos y halagar a los “gastones” o queremos una acuicultura social para garantizar seguridad y soberanía alimentaria? El boom de la acuicultura carnívora incrementa las capturas totales y, según todas las evidencias científicas, la sobrepesca.

Y tanto que nos gusta mirar hacia el sur, la harina que se produce de la pesca del jurel y la anchoveta se destina a fabricar concentrado para engordar a los salmones de la acuicultura. ¿Quiénes comen salmones? No la gran mayoría del pueblo chileno. Es insostenible mire por donde se le mire.

El futuro de la acuicultura está en el cultivo de peces omnívoros o herbívoros, como la lisa y el jundiá. El cultivo de mugílidos es uno de los más bajos en costos en el mundo y nos caería como anillo al dedo para producir pescado de calidad que pueda llegar a la mesa de los peruanos y no como se pretende, producir pescado para otros mercados.

Como peruanos, ¿no tenemos acaso derecho a comer pescado de calidad? Claro, si tienes plata para pagar 50 soles por un kilo de lenguado o 40 soles por un plato de ceviche.

Conclusión

La incapacidad de Aguilar y la de su dilecta amiga, la Coordinadora del Área Funcional de Investigaciones en Acuicultura, Lili J. Carrera Santos de Santos, para ejecutar el PpR de Acuicultura las ha conducido primero a despedir traicioneramente a ocho ex colegas y ahora, producto de su afiebrada mentalidad y embriagadas del poder que ostentan y que ni en sus mejores sueños imaginaron tener en el gobierno de Humala, achacan la culpa de su fracaso en la gestión del PpR, al Área Funcional de Logística.

Esta es la situación de la Institución designada a marcar el derrotero de las investigaciones en acuicultura en el Perú. Mal venida y dirigida por personal sórdido, doctorado en traición e incapacidad.

sábado, 27 de abril de 2013

LAS CONTRADICCIONES DE LA PESQUERÍA DE ANCHOVETA


A la vedette de la pesca peruana se la quieren comer todos, mientras el BIC Olaya se malogra en altamar

 

 

 

El día 24 de abril del presente en el programa "Abre los Ojos", dirigido por el periodista Beto Ortiz, disertaron sobre el tema de las cuotas de la anchoveta los ex-ministros Aurelio Loret de Mola, abogado de la poderosa Sociedad Nacional de Pesquería, y Rafael Rey Rey.  Estas voces se suman a las de personajes como el comentarista deportivo (sic) Phillip Butters, quien acusó a la ex-Viceministra de Pesquería, Patricia Majluf de ser pro-chilena por tener un esposo chileno. Pero, ¿a qué viene tanto y tan repentino interés por la pesquería peruana? Desmenucemos y analicemos las palabras del abogado Loret de Mola, feroz defensor de los industriales pesqueros.

Loret de Mola mencionó que hace un mes aproximadamente el Presidente Ollanta Humala afirmó públicamente que la anchoveta se encontraba en peligro de extinción, pero que sin embargo, el día anterior (23 de abril del 2013), en una nota de prensa del Ministerio de la Producción, se mencionaba que habían más de 12 millones de toneladas anchoveta en la zona o stock Norte-Centro. Sin ocultar la sorna, Loret de Mola llamó a esta "repentina" subida de la biomasa, "el milagro de los peces". Además, mencionó Loret de Mola, que no se observa una abundancia importante de la población nacida en el invierno del 2012 y que la actividad reproductiva del verano del 2013 fue baja y no se observó a lo largo del crucero, en una seguidilla de frases mal aprendidas y peor hilvanadas. Entonces, continuó Loret de Mola, si para octubre del 2013 habían 5.3 millones de toneladas de anchoveta, no pueden haber ahora 12 millones de toneladas cuando no ha habido actividad reproductiva.

A pesar de todo, sentimos decir que Loret de Mola está en lo cierto: si no hay actividad reproductiva, no puede aumentar la biomasa. ¿O sí? ¿A qué se debería ese aumento tan pronunciado de biomasa del stock Norte-Centro? ¿O es que la biomasa del invierno del 2012 estaba conformada por juveniles que al aumentar en talla y en peso incrementaron la biomasa para el verano del 2013? Esto último puede ser bastante lógico, si tenemos 1000 ejemplares de 10 gramos de peso cada uno, o sea 10 kg de biomasa, y estos pasan a pesar 25 gramos por unidad en unos meses, entonces la biomasa pasa a 25 kilogramos. Pero esto no se sostiene por ningún lado, pues la anchoveta tiene un ciclo de vida y dado su tamaño termina como alimento de muchas otras especies que dependen de la riqueza del mar para vivir, entre ellas nosotros. Y más aún si tomamos en cuenta las declaraciones del propio Presidente del Imarpe, el Calm(r) Germán Vásquez-Solís Talavera, dadas el 31 de octubre del 2012 en una reunión en el Imarpe:

 

 

¡Dos millones de toneladas de anchoveta de descarte! ¡Toda una cohorte juvenil perdida! Las palabras del Presidente del Imarpe son claras: hay un mal manejo del recurso y en ello tienen la culpa los armadores industriales y los pocos que controlan la pesquería nacional. Entonces, ¿De dónde sale esa información que menciona el Calm. Vásquez-Solís y que luego dice que no se puede sostener con base científica? Si se han descartado tantos juveniles, ¿de dónde aparece la biomasa de ahora?

La pregunta que cae de madura, es, ¿qué sucede entonces con la pesquería peruana y con los sesudos estudios del Instituto del Mar del Perú?

La Ministra Triveño no se embarca de crucero para hacer estas mediciones de biomasa y luego analizar los datos. La Ministra no prepara el crucero. La Ministra no compra todos los implementos necesarios para el crucero. La Ministra tampoco verifica los mantenimientos de los buques de investigación del Imarpe, cuya información detallada se encuentra en el Informe de la Comisión de Transferencia del Sector Pesquero, comisión que fue presidida por la actual Jefa de Gobierno Interior, la Dra. Nena Escalante.

Al respecto de esto último, el Sr. Roberto Vieira, vinculado a los armadores pesqueros industriales, en declaraciones el día 26 de abril del 2013 en el programa "Buenos Días Perú" de Panamericana TV (http://www.youtube.com/watch?v=EXv5gEcZ6Eg), dijo “que el Buque de Investigación "José Olaya" fue mandado por la Ministra Triveño a hacer un estudio en diciembre del 2012 para corroborar la biomasa de la anchoveta que sustenta la cuota asignada”, en ese entonces, de 810,000 toneladas y, en insinuaciones peligrosas, dijo “que en pleno crucero el "Olaya" sufrió un "desperfecto" en el grupo electrógeno”. Esta avería de la nao de investigación se puede corroborar entre todos los científicos que participaron del crucero, a quienes, por otro lado, se les ha ordenado no mencionar nada al respecto. Lo que insinuó abiertamente el Sr. Vieira es que el BIC “José Olaya” se habría "malogrado" con la finalidad de evitar que la Ministra pase un papelón, como el que pasó la ex-Viceministra de Pesquería, Patricia Majluf con el caso de la merluza en el segundo trimestre del 2012 y que de paso le costó el puesto, al ceder Palacio de Gobierno a las presiones de los industriales merluceros, casi todos extranjeros, quienes movilizaron a la gente en el norte y bloquearon carreteras con el penoso saldo de dos pescadores muertos.

Lo que finge no comprender el asesor de los armadores industriales pesqueros, Roberto Vieira, es que la Ministra ordena al Imarpe hacer el estudio y es el Imarpe, o mejor dicho, la Alta Dirección del Imarpe, ergo, el Presidente y el Director Ejecutivo Científico, quienes deciden enviar al "Olaya" de crucero. Esta decisión, tomada por la Alta Dirección del Imarpe, a pesar de que el ex-marino Vásquez-Solís declarara, en la misma reunión del 31 de octubre del 2012, lo siguiente respecto al buque de investigación en mención:


Entonces se puede concluir con absoluta claridad que:

  1. Es el Presidente del Imarpe, el Director Ejecutivo Científico y sus Directores, quienes tienen que responder por el "crucerus interruptus" de diciembre del 2012.
  2. Es el Presidente del Imarpe, el Director Ejecutivo Científico y sus Directores, quienes tienen que responder por las diferencia de biomasa entre el crucero de invierno del 2012 y el de verano del 2013. Esas diferencias no se deben dar, no se pueden dar, como bien dice el abogado de la Sociedad Nacional de Pesquería Aurelio Loret de Mola. ¿Por qué insiste la Alta Dirección del Imarpe en boicotear la gestión de la Ministra Triveño y darle en la yema del gusto a la todopoderosa Sociedad Nacional de Pesquería, actuando ladinamente?
  3. ¿Se están haciendo mal las mediciones de biomasa de anchoveta? ¿Se está inflando los datos? ¿Los datos son trucados por la Alta Dirección para favorecer a terceros? Si este último es el caso, entonces se busca favorecer abiertamente a la Sociedad Nacional de Pesquería. Si se están haciendo mal las mediciones de biomasa de anchoveta, ¿Quiénes son los culpables directos? ¿Los técnicos del Imarpe? ¿Quiénes son ellos?
  4. Dos personas vinculadas directamente a la medición de la biomasa de anchoveta, profesionales que se venían desempeñando con contrato administrativo de servicios (CAS, D.L. 1057) de la Dirección de Investigaciones de Recursos Pelágicos (la dirección que ve anchoveta) del Imarpe han sido premiados con nombramientos D.L. 728 en concurso de mérito público, amañado (CAP N° 001-2013-Imarpe): Cecilia Liliana Peña Tercero (a Investigador I) y Erich Enrique Díaz Acuña (a Investigador IV). Adicionalmente a ellos han sido favorecidos con nombramientos otros dos profesionales CAS: David Ricardo Oliveros Ramos (a Investigador II, del Área de Modelaje,) y el técnico Jairo Calderón Martell (Técnico Investigador VI, de la Dirección de Investigaciones en Hidroacústica, Sensoramiento Remoto y Artes de Pesca). Estos cuatro flamantes nuevos miembros de la planilla D.L. 728 del Imarpe tienen que ver directamente con el cálculo de biomasa de anchoveta. Si aceptamos la premisa de que se están cometiendo errores sistemáticos en las mediciones de biomasa de anchoveta, un error se sanciona, aquí, se premia, ¿Premio a qué?

El error mayúsculo que cometen la Ministra Gladys Triveño y el Viceministro de Pesquería Paul Phumpiu es mantener en el cargo de Presidente del Imarpe, al Calm(r) Germán Vásquez-Solís, cuyo único mérito para ostentar tan importante cargo es su supuesta amistad con la familia del Presidente de la República y su señora esposa, de la cual hace alarde cada vez que se le presenta la oportunidad.

Es hora que la Presidencia del Imarpe la ocupe un civil con las credenciales necesarias para dirigir una institución que tiene por finalidad proveer los elementos necesarios para el buen manejo de los recursos pesqueros del país. Como se sabe hacer esto es algo difícil, dado que tiene que cambiarse el D.L. N° 95, Ley del Instituto del Mar del Perú (recomendación primordial anclada en el Informe de la Comisión de Transferencia del Sector Pesquero), pero cuando hay voluntad política de hacer las cosas no debería tomar ni mucho esfuerzo, ni mucho tiempo.

Si seguimos así volverá a ocurrir la debacle de la pesquería de la anchoveta de los 70’s, cuando las aves marinas hambrientas invadieron los mercados de Lima y quizá no haya segundas oportunidades, la novia-vedette de la Sociedad Nacional de Pesquería se irá para no volver.

Acuicultura Sostenible